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Tecnología Blockchain aplicada al ámbito legal

Es una realidad que la tecnología está transformando la prestación de servicios legales en el mundo. La justicia en línea, la utilización de ventanillas electrónicas para trámites administrativos, la contabilidad electrónica, la fiscalización a través de medios digitales y la consultoría jurídica a través de plataformas digitales apoyadas por inteligencia artificial, son sólo algunos ejemplos de la forma en que los servicios legales se han adaptado a una nueva era.

Una de esas tecnologías es la cadena de bloques conocida en inglés como Blockchain. Intentemos explicar de la manera más sencilla posible qué es y cómo se aplica en el ámbito legal.

La tecnología blockchain o cadena de bloques es un sistema para realizar transacciones electrónicas sin depender de la confianza de un tercero. Constituye un registro descentralizado de información con el objetivo de mejorar la confianza entre las partes de un negocio.[1]

Funciona a través de aplicaciones descentralizadas capaces de operar de manera autónoma sin que ninguna entidad central las controle. Cualquier cambio en las transacciones registradas en la cadena de bloques debe decidirse por consenso entre cada uno de los usuarios.

Uno de los principales objetivos de la tecnología blockchain es reducir el coste de la confianza social y eliminar la intermediación.[2] Esto se logra a través de una red descentralizada en donde todos los usuarios somos testigos de lo que pasa en cada una de la transacciones que se registran en la cadena de bloques.

El uso  de esta tecnología está asociado a las criptomonedas (Bitcoin, Ethereum, etc.), o a la celebración de contratos inteligentes, sin embargo, no es su único fin.

Veamos algunos ejemplos.

Eres socio o accionista de varias empresas, ¿te gustaría que las asambleas se lleven a cabo a través de videoconferencias y que los acuerdos y las actas se firmen electrónicamente garantizando confiabilidad tecnológica, seguridad y certeza jurídicas a todos los intervinientes?

O mejor aún, ¿Puede la tecnología Blockchain facilitar el gobierno corporativo de una sociedad mercantil?

Con el marco legal que tenemos actualmente en México, las asambleas de las sociedades mercantiles son presenciales, los acuerdos adoptados en las asambleas se firman autógrafamente en actas que, posteriormente y dependiendo de la naturaleza de los acuerdos adoptados, esas actas deben protocolizarse ante la fe de un notario público.

La tecnología Blockchain nos permitiría registrar los acuerdos de los socios o accionistas a través de transacciones que se irían acumulando en la cadena de bloques, en la que cada uno en su calidad de usuario final, firmaría los acuerdos desde un nodo o equipo de cómputo remoto, sin necesidad de que la asamblea sea presencial.

Una vez encriptada la transacción y sellado el bloque con un código llamado “hash”, la información es inalterable y todos los intervinientes son testigos de su contenido.

¿Eventualmente esto reduciría la intervención del notario público? No necesariamente.

Otro ejemplo. ¿Te imaginas que, en tiempos de elecciones podamos votar para elegir a nuestras autoridades en una casilla digital o en urnas electrónicas y que se reduzcan los riesgos de fraude electoral?

Sería increíble votar desde casa o, en el peor de los casos, acudir a una casilla en donde no hayan representantes del INE o de los partidos políticos. Simple y sencillamente acudes al espacio físico en donde se encuentre la urna electrónica, te identificas con biométricos y votas.

La tecnología Blockchain nos permitiría concentrar los votos obtenidos por cada partido en bloques que, una vez acabada la jornada electoral, los partidos validarían desde un nodo con el propósito de encriptar los resultados electorales con un código hash.

El riesgo de fraude quedaría prácticamente eliminado, porque los votos se contarían automáticamente, no existiría duda de la verdadera voluntad democrática de la ciudadanía pues el voto no admitiría ningún tipo de error o interpretación indebida.

La función del INE se reduciría a fiscalizar el financiamiento para las campañas políticas, integrar un padrón electoral en el que se concentre la información biométrica de los ciudadanos y se garantice su resguardo y, el día de la jornada electoral, que las casillas se instalen adecuadamente para recibir la votación de la ciudadanía.

Como puedes observar el uso de esta tecnología garantiza confianza y elimina la intermediación de terceros en actos jurídicos (llamados transacciones desde el punto de vista tecnológico), y reduce los costos de cualquier tipo de servicio en el que se deba garantizar confianza y objetividad.

Si deseas conocer más acerca de la tecnología Blockchain no te pierdas el curso que Naticum está organizando conjuntamente con el Colegio Notarial Yucateco A.C., en donde se estudiarán las bondades de este tipo de tecnología y cómo se está aprovechando actualmente en México.

Puedes ingresar en el siguiente forms e inscribirte:

https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSfWHffz2MNeXd39Q8DEUeSxLlG23j6_uxrDxwrAH_tF49PcOw/viewform?usp=sf_link


[1] Morales Barroso, José, ¿Qué es Blockchain?, en Criptoderecho. La regulación del Blockchain. Pablo García Mexía coord. España, Wolters Kluwer, 2018, p. 42.

[2] Ídem

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